Fuera de las pruebas, el mayor reto para los participantes y la producción es sobrevivir en África.
El desafío que asumió Caracol TV para conmemorar la décima edición de su programa concurso más exitoso fue realizarlo desde la República de Senegal, territorio donde se hablan diferentes lenguas locales y donde quien quiera hacerse entender debe saber por lo menos algo de francés. Para empezar, de Colombia viajaron 170 personas que integran el equipo de producción, pero allá fue necesario contratar a 130 nativos. Mucho tardaron en comprenderse, y ante la gran barrera idiomática que retrasó las grabaciones, lo que han hecho es acudir a las señas.
No ha sido fácil para nadie. Llevar a civilizados competidores al llamado ‘origen’ ha implicado que hayan tenido que doblar el presupuesto inicial porque eso de sobrevivir al ‘otro lado del charco’ y además mostrarlo en la pantalla es muy costoso. Pero las imágenes de espectaculares paisajes y animales salvajes han valido la pena. El resultado es una audiencia arrasadora. (Conozca los participantes de realities que han aprovechado el 'pantallazo').
Lo que los televidentes fieles y encantados, además, con las competencias no ven es todo lo que ocurre detrás de: por ejemplo, el platón con agua helada en el que Margarita Rosa tiene sus pies para refrescarse mientras presenta y la cámara solo enfoca su rostro. El televidente solo ve un plano medio de ella muybien puesta.(Vea la galería Recordando el paso de EL TIEMPO... Margarita Rosa De Francisco).
El calor es agobiante, de 50 grados bajo sombra, mucho más si se tiene en cuenta que en nuestro país el clima más cálido marca 40 en el termómetro. Otros que tampoco se ven al aire son el novio y la mamá de la presentadora, pero tanto Will van der Vlugt como Mercedes Baquero, quien además es su asesora de modas, viajaron hasta allí para acompañarla. Supimos que si alguien se ha conmovido con las grandes necesidades de los niños de este continente es ‘la Mencha’, quien en sus ratos libres visita las comunidades más cercanas y toma fotografías de los hechos.
En cámara, la conductora aparece feliz, pero la verdad es que posar al lado de los leones le dio pánico. Dos domadores estaban a lado y lado. La toma tuvo que repetirse varias veces pues el rugir de los reyes de la selva interrumpía el parlamento de la rubia. Eso sí, valga la aclaración, los sonidos que se escuchan de animales salvajes y las imágenes que se ven de ellos son reales y no incluidas en edición.
Por otro lado, a la par con los concursantes, los forasteros de la producción han aguantado hambre pues pocos disfrutan los platillos africanos como el que les ofrece la familia Cerer, que los acoge a ellos y a quienes llegan a la tribu.
Seguramente los diarios de viaje de los participantes que vayan saliendo traerán muchas y sorprendentes historias.
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